¿Crees que es importante exponer los niños a la Naturaleza?

¿Crees que es importante exponer los niños a la Naturaleza?

El amor que siento por la Naturaleza y la necesidad constante de conexión con ella, son las razones más relevantes que me impulsaron para escribir este artículo. Además de experimentar a diario la alegria auténtica de los niños de mi clase cuando les anuncio “Es tiempo de jugar afuera!!”.

 

 

Como mi criterio personal, considero que una gran parte de la humanidad conoce poco -o incluso desconoce- sobre el delicado equilibrio y la perfección de nuestro hermoso planeta, lo cual genera una inconsciencia respecto al amor, la reverencia y el cuidado que merece.

 

Es vital educar a los niños para conocer, amar, respetar, proteger y vivir en armonía con lo natural, ofrecerles alimentos que crecen en la tierra, y que aportan sustancias esenciales, las cuales favorecen una buena salud, energías de alta vibración, estados mentales y emocionales elevados, e interactuar con animales y plantas de manera saludable.

 

La Naturaleza es la que nos provee de todo lo necesario para llevar una vida con salud y bienestar. Muchos estudios demuestran que cuando nos alimentamos con productos de la tierra, y regularmente interactuamos en entornos naturales, nos mantenemos lejos de los doctores (medicinas, hospitales y farmacias).

 

El propio Hipócrates -el padre de la medicina- afirmaba que «la naturaleza misma es el mejor médico».

Si procuramos rodearnos de árboles, cerca de un parque natural, del mar o de un bosque, es más probable que nuestra salud sea buena. Adicionalmente, si salimos descalzos, o nos acostamos en la hierba, estas acciones simples,  nos ayudan a descargar el dañino estrés, provocado por nuestra reacción a diferentes estímulos cotidianos a los que vivimos sometidos.

 

Especialmente los niños, por lo general se sienten atraídos a salir, correr, trepar, saltar, jugar con otros niños, con mascotas, o incluso con adultos dispuestos a compartir tiempo con ellos. A ellos no les importa jugar con tierra o con arena, lo cual les reporta beneficios

que no alcanzamos imaginar. 

Ellos tienen una curiosidad innata, que los impulsa a explorar, observar, curiosear el entorno circundante, y es una ventana a través  de la cual les podemos mostrar que en gran medida, nuestra vida y salud depende de la vida y salud de este bello lugar que llamamos Tierra.

¿Cuándo sería el momento más adecuado en la vida de un ser humano, para estimular sentimientos de unicidad, amor y cuidado por la Madre Naturaleza? Independientemente de la edad que tenga, la respuesta es AHORA.

 

La conexión con la naturaleza provoca un impulso por amar y cuidar toda forma de vida, esto incluye el mundo animal (sin importar la especie), el vegetal, y a todos los seres humanos, con independencia del lugar donde vivan, su raza y tendencias políticas, espirituales o religiosas.

 

Este sentimiento es innato al ser humano, vital y necesario, tanto así  que la desconexión con la naturaleza, podría acarrear consecuencias negativas, tanto en el cuerpo físico, como a nivel mental y emocional.

 

Actividades al aire libre y una vida en contacto con la Naturaleza nos benefician por igual a niños y adultos, y esto ha sido avalado por muchos estudios científicos realizados por reconocidas instituciones.

 

 

A continuación te doy a conocer algunas investigaciones y los interesantes resultados que arrojaron, aunque por tu cuenta, también puedes hacer tu propia búsqueda.

Un estudio realizado por la Unversidad de Michigan, demuestra que los beneficios de la naturaleza son multiples, incluso, ver fotos de paisajes naturales que visitaste en tus vacaciones, puede aportar una mejora en el funcionamiento cognitivo, este estudio sostiene que la naturaleza capta la atención de forma ascendente, lo cual ayuda a reponer las habilidades de atencion dirigida desde arriba hacia abajo.

 El doctor Marc G. German -quien lideró la investigación- demostró como un paseo de 20 minutos en un ambiente natural, fue suficiente para que los participantes en el estudio experimentaran una mejora en la memoria, en comparación con los que realizaron el paseo en un entorno urbano.

Otro estudio demuestra que el contacto con la naturaleza influye en la salud mental. Los niños más expuestos a la naturaleza tienen mejor salud mental cuando llegan a la adultez, según un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal).

Hasta ahora, la exposición a espacios naturales al aire libre se ha asociado con beneficios para la salud, como un mejor desarrollo cognitivo y un mejor bienestar mental y físico, pero pocos habían explorado el impacto de la exposición a entornos naturales durante la infancia, en la salud mental y la vitalidad en la edad adulta.

Muchas investigaciones indican que ir a un parque natural, practicar senderismo por el bosque, ir a la playa o pasar un fin de semana junto a un lago, puede atenuar los niveles de estrés de las personas, disminuir la presión sanguínea y reducir el riesgo de padecer asma, alergias, diabetes y enfermedades cardiovasculares.

Además de que mejora la salud mental y aumenta la expectativa de vida. Los médicos en todo el mundo han comenzado a prescribir tiempo al aire libre como una manera de mejorar la salud de sus pacientes.

Nooshin Razani, pediatra del Hospital Infantil U. C. S. F. Benioff en Oakland, California, ha adoptado la costumbre de prescribir tiempo al aire libre a sus pacientes con bajos ingresos. A menudo organiza salidas en grupo a zonas recreativas cercanas en el Distrito de Parques Regionales del Este de la Bahía.

“Cuando vas a un parque con tu familia, suceden muchas cosas positivas”, dijo Razani. “Los niños juegan y se activan físicamente. Pueden socializar y liberan el estrés”. Los adultos experimentan los mismos beneficios, agregó.

Otro ejemplo es el de El instituto Swiss Re , el cual ha sacado a la luz un informe en el que se recogen numerosas investigaciones científicas realizadas a nivel mundial, donde se puede confirmar que tener una relación diaria o semanal con algún espacio natural, ayuda a gozar de mejor salud, tanto física, como mental.

También, un equipo internacional liderado por las Universidades de Washington y Stanford, ha creado un marco para que los planificadores urbanos de todo el mundo, puedan medir los beneficios de la naturaleza para la salud mental e incorporarlos en los planes y políticas para las ciudades y sus residentes.

Ellos han demostrado que la exposición a la naturaleza está vinculada a la mejora del funcionamiento cognitivo, la memoria y la atención, la imaginación y la creatividad, así como el rendimiento escolar de los niños.

Está claro que la ciencia demuestra con evidencias medibles, que la exposición regular a ambientes naturales, favorece nuestra salud física, mental y emocional y la de nuestros hijos.

¿Cómo integrar en tu rutina familiar, tiempo para estar en contacto con la naturaleza?, tu propio ser te lo agradecerá, tu familia y fundamentalmente los niños.

• Enseña a tus hijos el respeto por todas las formas de vida, como hábito indispensable de amor y agradecimiento por la Creación.
• Integra actividades al aire libre que estimulen a tus hijos para querer salir a jugar o pasear.
• Cuando salgan, llama su atención para que vean las formas que hacen las nubes en el cielo, escuchen el canto de los pájaros, aprendan el nombre de algunas plantas y animales, etc.
• Practica con ellos plantar árboles, flores o vegetales, no tiene que ser un gran espacio, podría ser en una pequeña maceta.
• Permite que caminen descalzos sobre la hierba o la tierra, que no le teman a dejarse mojar por la lluvia.
• Si tus condiciones lo permiten, proporcionales una mascota con la que puedan interactuar.
• Enseña a tus hijos que todos somos uno, y por lo tanto, todo bien que hagamos al medio ambiente -animales, plantas, otros humanos- lo hacemos también por nosotros mismos.